En un nuevo show mediático, es evidente que el fiscal Barbosa sin duda alguna quiere evadir la investigación periodística en torno al fiscal Daniel Enrique Hernández Martínez.
El periodista Gonzalo Guillén presentó nuevas pruebas relacionadas con el caso del fiscal Daniel Hernández, las cuales fueron compartidas por el presidente Petro y aparentemente no fueron bien recibidas por el fiscal Barbosa.
En lugar de investigar los hechos, Barbosa optó por hacer un espectáculo mediático para desacreditar la investigación periodística de Guillén y así evitar que se siguiera hablando del tema.
El fiscal Daniel Hernández Martínez ha sido acusado de ignorar múltiples alertas e informes policiales sobre los planes de homicidio del Clan del Golfo en la Costa Norte, lo que desafortunadamente llevó a la muerte de más de 200 personas.
NUEVAS PRUEBAS
Un investigador de la Fiscalía General de la Nación identificó a los asesinos de más de 200 personas, incluyendo niños y militares, y le avisó al fiscal encargado para evitar que se cometieran los crímenes, pero estos ocurrieron de todas formas.
El investigador reunió registros noticiosos de los crímenes y los envió al fiscal por medio de mensajes de chat.
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El Clan del Golfo es responsable de muchos de estos asesinatos, incluyendo el de un funcionario de la propia Fiscalía.
A pesar de las pruebas recolectadas, el fiscal encargado ha impedido que algunos de los delincuentes sean registrados como tales.
El investigador también descubrió información sobre exportaciones de cocaína y lavado de dinero, que el fiscal ha ocultado a la justicia de los Estados Unidos.
El investigador afirma que los homicidas, que actualmente continúan libres, son 14 empresarios del crimen del Clan del Golfo en la costa norte, y que los muertos pueden pasar de cinco mil, algo que podría probarse si la Fiscalía General permite investigar a fondo. A pesar de las pruebas judiciales recaudadas, el fiscal encargado de este caso ha impedido incluso que algunos de esos 14 delincuentes sean registrados como tales en la Fiscalía General.
El expediente 110016000088200800056 fue trasladado de la costa norte a Bogotá con el objeto de engavetarlo en su despacho, y allí continúa y está activo.
El traslado fue ordenado por el fiscal general y la vice fiscal, para que el fiscal encargado lo congelara ante el temor de que los desmanes y crímenes de lesa humanidad del Clan del Golfo pudieran estar asociados al expresidente Iván Duque a través del narcotraficante y asesino José Guillermo Hernández Aponte, alias “Ñeñe”, que le financió la campaña electoral y le compró votos en siete departamentos del norte del país.
En Colombia, la Fiscalía General es la entidad encargada de investigar y perseguir los delitos en el país.
Sin embargo, en los últimos años, ha sido objeto de críticas por su falta de transparencia y su aparente connivencia con la corrupción y los grupos armados ilegales.
Uno de los casos más emblemáticos de esta situación es el de la “Ñeñepolítica”, un escándalo de corrupción que involucra al expresidente Iván Duque y al narcotraficante José Guillermo Hernández Aponte, alias “Ñeñe”.
Según informes periodísticos, “Ñeñe” habría financiado la campaña electoral de Duque y comprado votos en siete departamentos del norte del país.
La investigación de este caso fue ordenada por el fiscal general, Francisco Barbosa, y la vice fiscal, Martha Mancera.
Sin embargo, Barbosa, quien formó parte de la campaña de Duque, archivó la investigación y amenazó a los investigadores que intentaron sacarla adelante.
Además, se reveló que no se declaró impedido en el caso de la “Ñeñe-política”, a pesar de su conexión con Duque y la campaña electoral.
Este caso también involucra al fiscal Daniel Ricardo Hernández Martínez, conocido en la Fiscalía General como “sicario judicial del despacho”.
Hernández Martínez tiene a su cargo gran cantidad de casos cuyo desarrollo legal no les convienen al actual fiscal y al ex vice fiscal Néstor Humberto Martínez Neira.
Por ejemplo, fue el responsable de esconder las órdenes de captura contra tres altos funcionarios brasileños de Odebrecht en Colombia, a los que les permitió vender sus bienes, sacar los fondos que tenían en bancos y huir del país. Debido a esto, incluso, encara la posibilidad de ser pedido en extradición por Estados Unidos, acusado por el delito de fraude procesal.
En el caso del Clan del Golfo, una organización criminal que ha cometido numerosos crímenes en la costa norte de Colombia, Hernández Martínez ha sido acusado de ignorar las advertencias y los informes policiales que recibió sobre estos asesinatos.
A pesar de las denuncias presentadas por el autor del reportaje ante instancias judiciales y organismos defensores de los derechos humanos, Hernández Martínez se ha negado a actuar contra estos crímenes, y la Fiscalía colombiana no lleva ninguna investigación por su connivencia con los homicidios del Clan del Golfo en la costa norte.
En este contexto, la falta de acción y transparencia de la Fiscalía General ha generado preocupación en la sociedad colombiana y ha sido criticada por diferentes sectores, incluyendo organizaciones defensoras de los derechos humanos y organismos internacionales.
Aunque el país ha avanzado en la lucha contra la corrupción y la violencia, la falta de transparencia y acción en casos como la “Ñeñepolítica” y el Clan del Golfo ponen en duda la eficacia de las instituciones y la capacidad del Estado para proteger a sus ciudadanos.
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