Ayer se confirmó la sentencia en contra del excongresista Nilton Córdoba por su participación en el escándalo conocido como el ‘Cartel de la Toga’.
La Corte Suprema de Justicia emitió una condena de 4 años y 7 meses de prisión, marcando así el fin de una larga investigación en torno a las prácticas ilícitas que involucraron a prominentes figuras políticas.
El alto tribunal llevó a cabo una minuciosa indagación para determinar si Nilton Córdoba, quien pertenecía al Partido Liberal, habría entregado la suma de $200 millones de pesos al magistrado auxiliar de la Corte Suprema de Justicia, Camilo Andrés Ruíz, utilizando como intermediario al exfiscal anticorrupción, Luis Gustavo Moreno Rivera.
Resulta destacable que, a pesar de las acusaciones y las pruebas que señalaban la implicación de Nilton Córdoba en actividades corruptas desde 2014, el excongresista se postuló para el cargo de senador en 2022, contando con el aval del Partido Liberal.
Esto, en gran medida, fue posible gracias a la aparente indiferencia de Cesar Gaviria, quien lidera dicho partido.
Incluso en 2019, la Corte Suprema de Justicia formalizó las acusaciones en su contra.
Estos eventos arrojan la verdadera cara de Cesar Gaviria y también la integridad de su partido, pues parece no importarle la presencia de individuos corruptos en sus filas.
Una vez más queda demostrado que el enfoque de Cesar Gaviria se orienta hacia la consolidación de poder, buscando obtener congresistas que, posteriormente, podrían ser utilizados para extorsionar a presidentes y solicitar cargos para sus hijos.
La administración de justicia, aunque tardó casi una década en el caso de Nilton Córdoba, finalmente ha cumplido su deber.
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