Más escándalos han sacudido a la Sociedad de Activos Especiales (SAE) recientemente.
En primer lugar, la SAE finalmente logró desalojar a la familia del excontralor de Antioquia, Sergio Zuluaga investigado por corrupción, de una lujosa vivienda ubicada en un exclusivo sector de El Poblado.
Sin embargo, lo más preocupante fue el hallazgo realizado por la SAE en una caja oculta en las oficinas de la entidad.
En dicha caja se encontraron rastros de 15 bienes pertenecientes a la empresaria del chance, Enilce López alias “la Gata”, quien ha sido condenada por homicidio, estos bienes habrían sido ocultados para evitar la extinción de dominio.
En la actualidad, resulta evidente la desesperación que embarga a la ultraderecha tras su pérdida de poder.
Ahora que no son gobierno se nota como gobernaban y los casos de corrupción que están saliendo a la luz.
Enilce López, conocida como “la Gata”, ha sido objeto de investigaciones por una amplia gama de delitos que incluyen lavado de activos, enriquecimiento ilícito, homicidios, paramilitarismo, concierto para delinquir y fraude procesal.
Parece que sus donaciones a las campañas de Uribe le han permitido evadir constantemente la justicia.
En cuanto a la SAE, funcionarios de la nueva administración han hecho un descubrimiento alarmante.
Un funcionario encontró una caja de documentos en un mueble, y al revisar su contenido, se percató de que contenía piezas procesales con membrete de la Fiscalía.
Estas piezas incluían actas de secuestro, documentos que inician los procedimientos de extinción de dominio sobre bienes que están involucrados en problemas judiciales.
Al comparar estas actas con el listado de bienes de Enilce López en extinción de dominio, se descubrió que al menos 15 de ellos se habían extraviado.
Estos bienes incautados no estaban bajo el control de las autoridades y alguien los había mantenido ilegalmente.
Estos escándalos revelan una situación preocupante en la que los gobiernos anteriores parecían haber protegido los bienes de “la Gata”.
Además, la SAE se vio forzada a desalojar a la familia del excontralor Sergio Zuluaga de una lujosa vivienda en El Poblado, la cual habían ocupado de manera irregular durante más de seis meses.
A pesar de una pausa temporal debido a una acción de tutela presentada por la esposa del excontralor, Laura Botero, alegando que el desalojo vulneraba los derechos de sus hijas adolescentes, la justicia determinó que las jóvenes tenían suficiente apoyo institucional para afrontar el desalojo.
Como resultado, el proceso de desalojo se reanudó el 23 de junio en una de las mansiones de la unidad residencial Olivares, cerca de la Transversal Superior, según confirmó el director de la seccional de Occidente de la SAE, Mauricio Urquijo.
No olvidar que el excontralor Zuluaga fue destituido de su cargo por la Procuraduría en una sentencia que fue confirmada en 2021.
Además, está siendo investigado por la Fiscalía por presuntas irregularidades durante su gestión, incluyendo el desvío de investigaciones a cambio de beneficios personales.
Se sospecha que Zuluaga adquirió la casa que le fue confiscada por la SAE mediante supuestas maniobras fraudulentas, incluyendo la falsificación de documentos.
Estos lamentables hallazgos ponen de manifiesto el grado de corrupción y abuso de poder que prevalecían en aquellos círculos de influencia, dejando en evidencia la necesidad de una verdadera transformación y transparencia en el ámbito político.
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