Actualmente, Vicky Dávila de Gnecco y el fiscal Barbosa están empleando sus últimos recursos para retrasar la votación para la elección de la nueva fiscal general.
Ayer, el Consejo de Estado, en segunda instancia, ha vuelto a rechazar la acción de tutela presentada por el magistrado Gerardo Botero.
Este último buscaba ordenar a la Corte Suprema de Justicia devolver al presidente de la República, Gustavo Petro, la terna para elegir al fiscal general de la Nación.
Si la tutela hubiese sido aceptada, el presidente Petro se habría visto obligado a retomar el proceso de selección para el cargo de Fiscal General, lo cual implicaría dedicar un mes a evaluar posibles ternados.
Posteriormente, la Corte Suprema de Justicia requeriría tres meses adicionales para analizar la nueva terna, programar entrevistas con los candidatos y, finalmente, llevar a cabo la evaluación respectiva.
La Corte tendría que realizar un minucioso estudio de las entrevistas antes de convocar a una votación.
En suma, considerando todos estos pasos, el proceso completo se extendería en un lapso de 6 a 7 meses.
Pero la respuesta negativa del Consejo de Estado no ha detenido las tensiones.
La Revista Semana ha publicado un artículo titulado “Preocupación en la Corte por carta del magistrado que denunció presiones, seguimientos y hasta un robo en medio de la elección de Fiscal”.
Este artículo, cargado de críticas y reproches, busca victimizar al magistrado Gerardo Botero, a pesar de haber perdido dos tutelas anteriormente.
El mañana 25 de enero, está programada la primera sesión del año 2024 y, crucialmente, la votación para elegir a la próxima Fiscal General de la Nación.
Es evidente que la extrema derecha buscará hacer todo lo posible para que la vicefiscal Marta Mancera asuma interinamente en la fiscalía general, con la intención de demorar la elección.
Es importante señalar que es habitual que los magistrados de la Corte Suprema elijan al nuevo fiscal general el 25 de enero.
Este precedente se remonta al 30 de enero de 2020, cuando eligieron a Francisco Barbosa con una votación unánime de 16 votos a favor de 16 posibles.
Dicha unanimidad resulta destacable, especialmente considerando que en esa ocasión faltaron siete magistrados en la sesión.
Ahora, con la totalidad de los 23 magistrados presentes, la Corte Suprema tiene todas las condiciones para llevar a cabo la elección de la nueva fiscal general el 25 de enero.
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